Etiqueta: Control de plagas

Todas las empresas alimentarias deben contar con un sistema de autocontrol para garantizar la seguridad de los alimentos que producen, transforman, almacenan o comercializan.

Este sistema incluye un plan general de higiene y el plan de Análisis de Peligros y Puntos Críticos de Control (APPCC). Para asegurar la producción de alimentos seguros, es fundamental que el APPCC esté respaldado por un sólido plan general de higiene, que abarca aspectos como trazabilidad, control de proveedores, limpieza y desinfección, gestión de residuos, mantenimiento preventivo de instalaciones y equipos, control de plagas, formación de empleados y control del agua.

En ambientes urbanos, los ácaros y cucarachas representan importantes plagas en la industria alimentaria.

Entre los ácaros, destacan el ácaro de la harina, el ácaro de los bulbos, el ácaro del moho y el ácaro de la fruta seca, que contaminan diversos productos almacenados. Por otro lado, las cucarachas, como la cucaracha alemana, americana y oriental, transmiten microorganismos patógenos como Salmonella y Escherichia coli, siendo un riesgo significativo en entornos como restaurantes y cocinas. Su presencia contamina el ambiente y los alimentos, requiriendo medidas de control adecuadas para garantizar la seguridad alimentaria.

La presencia de plagas en instalaciones donde se producen, manipulan, almacenan o distribuyen alimentos es inaceptable, especialmente cuando se trata de plagas causadas por artrópodos. Los riesgos asociados incluyen la propagación de organismos patógenos, contaminación de superficies y utensilios de trabajo, daños en instalaciones, riesgo de contaminación química, pérdida de reputación, dificultades de acceso a mercados, sanciones y malestar entre los empleados.